RUN, RABBIT RUN. ¿Te he dicho que me gustan tus manos? - No lo recuerdo- Pues me gustan tus manos. Parece que no me vas a dejar caer. Detesto los hombres con manitas de señorita. Despiértame cuando pase el temblor, que mientras tanto yo me voy a quedar anclada a vos. Polo a tierra. ¿Te he dicho que me gustan tus brazos? -Nunca me decís nada- Pues me gustan tus brazos. Parecen hechos para que no me dejés escapar.