tag:blogger.com,1999:blog-41458724305076076092024-03-07T18:01:32.309-08:00gatonecioESTO NO ES UNA AUTOBIOGRAFÍAGATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.comBlogger58125tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-89175008930472616122019-10-31T17:10:00.001-07:002019-12-03T11:32:47.810-08:00<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt;">
<style type="text/css">
p.p1 {margin: 0.0px 0.0px 0.0px 0.0px; font: 12.0px 'Helvetica Neue'}
</style>
<br />
<div class="p1">
<style type="text/css">
p.p1 {margin: 0.0px 0.0px 0.0px 0.0px; font: 12.0px 'Helvetica Neue'}
</style>
<br />
<div class="p1">
Pegado a un árbol hay un letrero que se cae a pedazos, dice algo sobre la iluminación del Buda y sus 6 poderes milagrosos.<span class="Apple-converted-space"> </span></div>
<div class="p1">
No nos gustan las flores que se pudren en el piso, el moho en los rincones, las hormigas encontrando el camino a casa entre las hojas secas y los empaques vacíos y la basura mientras cargan bichos muertos sobre la espalda, los gritos agudos de las salamandras pálidas o el árbol que tercamente decide echar raíces sobre una mole de granito hasta romperla. No, nos gustan las cosas imposibles, la magia sobrenatural, la esperanza de poner orden sobre el caos, en esta vida o en la otra. </div>
<div class="p1">
El pequeño templo de la montaña está oculto entre las rocas y los árboles y las hojas enormes del bambú. Alguien ha escondido un parlante y suena pacito la letanía de los monjes. Si miras con atención, alcanzas a ver las marcas de la artillería pesada, agujeros redondos grabados en el granito rosado. Hay que esforzarse para ver las cicatrices de la guerra, pero ahí están. Siempre sonrientes e infinitamente generosos, los vietnamitas celebran estar vivos. Mientras las fiestas se hacen en honor a los que han muerto, las tumbas se mezclan con las casas y los campos de arroz y los jardines y la gente con chancletas.</div>
<br /></div>
</div>
GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-19475657454357755802019-03-21T09:34:00.000-07:002019-03-31T15:38:01.425-07:00<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: , , , ".sfnstext-regular" , sans-serif; font-size: 14px;">Fue el Gato, el primer gato, quien me dijo que no marcaba los libros porque no eran suyos sino de quien los necesitara, que sus libros eran libres y si los prestaba asumía el riesgo de que nunca regresaran. Ese día no entendí su idea del amor, pero me gustaban sus ojos amarillos. El otro Gato, el segundo, nunca supe si leía pero escribía cartas de amor y tenía talento para aparecer por casualidad en lugares insospechados. Lo conocí una noche, cuánd</span><span class="text_exposed_show" style="background-color: white; color: #1d2129; display: inline; font-family: , , , ".sfnstext-regular" , sans-serif; font-size: 14px;">o lo pillé mirándome agazapado detrás de las escaleras del restaurante. Una vez me lo encontré en la puerta del museo y luego no supe más de sus ojos verdes. Fue después de eso que Sur y yo comenzamos a traficar libros. Los pedíamos prestados y los escondíamos entre los rincones mugrosos de Chapinero, nos dejábamos pistas con las palomas de Lourdes. Nunca los devolvíamos. Nunca los marcamos.</span>GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-1917009420693049632019-03-21T09:29:00.001-07:002019-03-21T09:29:06.945-07:00<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: system-ui, -apple-system, system-ui, ".SFNSText-Regular", sans-serif; font-size: 14px;">El domingo llegó arrastrándose hasta el lunes en la noche, con un silencio tan doloroso que casi le servía de antídoto a la muerte. Según los últimos acontecimientos, probablemente encontraría la manera de perpetuarse agonizante hasta el martes. </span><br style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: system-ui, -apple-system, system-ui, ".SFNSText-Regular", sans-serif; font-size: 14px;" /><span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: system-ui, -apple-system, system-ui, ".SFNSText-Regular", sans-serif; font-size: 14px;">Los miércoles siempre han sido mejores, un poco menos pretenciosos. Habría que esperar entonces hasta el miércoles, que parece ser menos propenso a desplomarse.</span><br />
<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: system-ui, -apple-system, system-ui, ".SFNSText-Regular", sans-serif; font-size: 14px;"><br /></span>GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-68360685983212216082019-03-21T09:27:00.000-07:002019-03-21T09:27:28.674-07:00<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: system-ui, -apple-system, system-ui, ".SFNSText-Regular", sans-serif; font-size: 14px;">Ahí estábamos los dos con nuestros disfraces, sentados en una banca en el pasillo del hospital, sin saber qué hacer. Porque ¿quién nos creería si nos los dejamos? ¿Quién nos querría si nos los quitamos?</span>GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-10401465819801819492019-03-19T21:19:00.000-07:002019-03-19T21:19:08.790-07:00<div style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: system-ui, -apple-system, system-ui, ".SFNSText-Regular", sans-serif; font-size: 14px; margin-bottom: 6px;">
Se cansó de esperar que el café se enfriara y decidió solucionarlo echándole un trago de ron. Nos mintieron. Superalo. -Le había dicho con su impecable nuevo acento porteño- No vamos a ser ni bellos, ni ricos, ni famosos. </div>
<div style="background-color: white; color: #1d2129; display: inline; font-family: system-ui, -apple-system, system-ui, ".SFNSText-Regular", sans-serif; font-size: 14px; margin-top: 6px;">
En parte tenía razón ella, aunque bonita si era, a pesar de aquel detalle del ojo y además se había largado con un tipo rico. Él, bueno, él era otra historia.<br />Americano le decían ahora a esa cosa recalentada en microondas, que había pasado de ser un tinto hirviendo a un ron demasiado tibio. Vaya si le habían mentido.</div>
GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-61259904661024414202019-03-19T21:16:00.001-07:002019-03-19T21:16:11.522-07:00<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: system-ui, -apple-system, system-ui, ".SFNSText-Regular", sans-serif; font-size: 14px;">A veces el miedo se parece al frío, ese frío inmoral que te cala hasta los huesos, que no te deja dormir porque te pone a temblar, que se instala de a poquitos pero sin tregua ni compasión y se queda allí, sin preguntar ni pedir permiso, sin ganas de irse. El frío cobarde y agazapado que se escabulle por la rendija de la ventana, que aguarda en los rincones. A veces el amor se parece al miedo.</span>GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-66443260863140407782019-03-19T21:13:00.004-07:002019-03-19T21:14:28.127-07:00<br style="background-color: #ff0047; color: white; font-family: system-ui, -apple-system, system-ui, ".SFNSText-Regular", sans-serif; font-size: 30px; font-weight: 700; margin-bottom: 0px; text-align: center;" />
<span style="background-color: white; font-family: , , , ".sfnstext-regular" , sans-serif; text-align: center;">Entre todas las cosas que dijo, que a decir verdad fueron más bien pocas, nunca estuvo su nombre.</span>GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-14715455475792474382019-03-19T19:45:00.000-07:002019-03-19T19:45:11.462-07:00<div style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: system-ui, -apple-system, system-ui, ".SFNSText-Regular", sans-serif; font-size: 14px; margin-bottom: 6px;">
Hacerse viejo tenía solo una ventaja, había sobrevivido a todo, especialmente a sí mismo.</div>
GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-52239820404026966182018-11-11T07:12:00.002-08:002019-03-21T17:59:14.813-07:00<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: , , , ".sfnstext-regular" , sans-serif; font-size: 14px;">No sé si vos te acordás de él pero yo si. A mi me parecía un brutazo, pero una vez me sacó a bailar y en ese tiempo, en que todos eran flacos rodillones o bebés rollizos y sobredimensionados, alcancé a sentir los músculos de los brazos hechos a punta de boliar machete y los muslos templados de montar a pelo. Luego no supe mucho más porque finalmente se fue, a buscar el último refugio de los hombres libres, o algo así dijo, pero lo cierto es que la ciudad lo</span><span class="text_exposed_show" style="background-color: white; color: #1d2129; display: inline; font-family: , , , ".sfnstext-regular" , sans-serif; font-size: 14px;"> jodía. Se fue a vivir con sus caballos y sus perros y en los ratos libres se inventaba tareas inútiles para mantenerse ocupado.</span><br />
<span class="text_exposed_show" style="background-color: white; color: #1d2129; display: inline; font-family: , , , ".sfnstext-regular" , sans-serif; font-size: 14px;">Una vez empezó a llevar piedras desde el río, una a una, hasta que se hizo un muro de 4x2 en la parte de atrás de la casa. La tarde que lo acabó se sentó a mirarlo por horas y al día siguiente lo cogió a patadas, y así todos los días pacientemente hasta que lo tumbó. Devolvió cada piedra a su sitio y luego no quedó nada, ni arena, ni mancha, ni siquiera un pedazo de pasto aplastado.<br />Esa noche no durmió y las otras tampoco. Sintió que si solo él había sido testigo del muro y luego lo olvidaba, era como si nunca hubiera existido. ¿De qué manera podría saber que no lo había soñado? ¿de qué manera podría saber que aún estaba vivo?</span>GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-43802782678938711142018-11-07T07:42:00.001-08:002018-11-13T16:19:48.658-08:00<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt;">
<span style="background-color: white; color: #14171a; font-family: "helvetica neue"; font-style: normal; font-variant: normal; font-weight: 400; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Y si nos vemos o si nos vamos. </span></div>
<span id="docs-internal-guid-bb3b17c9-7fff-32ad-3caa-a9064a07fbdc"></span><br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt;">
<span style="background-color: white; color: #14171a; font-family: "helvetica neue"; font-style: normal; font-variant: normal; font-weight: 400; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Y corremos o escapamos.</span><span style="background-color: white; color: #14171a; font-family: "helvetica neue"; font-style: normal; font-variant: normal; font-weight: 400; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><br class="kix-line-break" /></span></div>
<span style="background-color: white; color: #14171a; font-family: "helvetica neue"; font-style: normal; font-variant: normal; font-weight: 400; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">O tal vez nos quedamos y encallamos, olvidamos y desaparecemos.</span>GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-68118044466522547862018-11-07T07:41:00.002-08:002018-11-13T16:20:03.317-08:00<span id="docs-internal-guid-9657577d-7fff-c08c-40c9-d03223760acf"></span><br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt;">
<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: "arial"; font-style: normal; font-variant: normal; font-weight: 400; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Sintió las primeras gotas chocando contra el vidrio y sacó la cabeza de su agujero, como las lombrices de tierra caliente cuando llueve. Comprobó que el mundo no se había detenido aún. Recordaba que había llovido todos los domingos sin interrupción, desde el 27 de abril de 1738. Un domingo cualquiera en el que no pasó nada especial, excepto la extraña aparición de tres cuervos muertos junto a la puerta del 325 de la Rue d'Assas, a 8617 km de casa. Agradecida maldijo la lluvia. Habría sido demasiado tener que soportar una tarde soleada.</span></div>
GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-4475763695132999652018-11-07T07:40:00.002-08:002018-11-13T16:20:18.271-08:00<span id="docs-internal-guid-a3f7a7db-7fff-e898-048a-c7b4d5adafcd"></span><br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt;">
<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: "arial"; font-style: normal; font-variant: normal; font-weight: 400; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">El funcionamiento de su cabeza se parecía al compu de la abuela, que una vez apretó el botón equivocado y le salieron 387 ventanas con páginas porno. Iba a escribir un correo, gente en pelota. Abría Word, una vieja gritaba. Quería ver un video de gatos, invitación a un chat privado. Acababa de entenderlo todo, lo suyo no era amor, era un virus.</span></div>
GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-67173593706978157672018-06-20T17:35:00.001-07:002018-11-13T16:20:25.686-08:00<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: , , , ".sfnstext-regular" , sans-serif; font-size: 14px;">Pensó que a pesar de todas las cosas que había en su cabeza, cosas útiles, cosas inútiles, cosas que solo ocupaban espacio, cosas inconfesables, cosas comunes; nunca supo qué forma tienen las cosas cuando naufragan.</span>GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-38731175363663222842018-06-11T18:00:00.001-07:002018-06-11T18:00:07.202-07:00<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: system-ui, -apple-system, system-ui, ".SFNSText-Regular", sans-serif; font-size: 14px;">Pensó en saltar desde el precipicio de sus letras, pero le tenía miedo al mar. Se quedó esperando sentado sobre unos puntos suspendidos.</span>GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-61495657346144191392018-06-11T17:59:00.001-07:002019-10-31T17:04:05.623-07:00<div style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: system-ui, -apple-system, system-ui, ".SFNSText-Regular", sans-serif; font-size: 14px; margin-bottom: 6px; margin-top: 6px;">
La vi por primera vez en el comedor del hotel, un metro ochenta y cinco de altura y un poco más en la circunferencia de sus caderas. El pelo negro en una moña templadísima y un vestido ajustado con rayas anaranjadas. Era imposible no verla.<br />
Había encallado esa mañana en la isla, se llamaba Elena, era rumana y me sonrió con susojosmuyazules. A partir de ese día, yo caminé junto a sus sombra.</div>
<div class="text_exposed_show" style="background-color: white; color: #1d2129; display: inline; font-family: system-ui, -apple-system, system-ui, ".SFNSText-Regular", sans-serif; font-size: 14px;">
<div style="font-family: inherit; margin-bottom: 6px;">
Grenard, que tenía el muy obvio apodo de Baba, de lejos parecía un bebé enorme; con su piel negra y dientes blanquísimos en una perpetua sonrisa, se bajó de la lancha y de un solo movimiento, sin el más mínimo esfuerzo, ni darme tiempo a echarle algún putazo, me sacó cargada y me dejó en la arena. Con una palmada en la espalda, que casi me regresa de jeta al mar dijo “te falta mucha carne en los huesos mama” y soltó una de sus carcajadas.</div>
<div style="font-family: inherit; margin-bottom: 6px; margin-top: 6px;">
En ese instante la vio por primera vez. Ella, de un blanco salamandra ya estaba insolada a parches, con el pelo desordenado y las tetas saliéndose a medias de su camiseta por el afán. Venía tarde y corriendo.</div>
<div style="font-family: inherit; margin-bottom: 6px; margin-top: 6px;">
Sentí que me clavaban con demasiada insistencia un dedo en el hombro. ¿Laviste, laviste, l a v i s t e? ¡¿Pero SI LA VISTE?! Es, es, es… es lo más inmensamente bello que que he visto, es gigantesca, inconmesurable y hay suficiente espacio para mi en entre esas caderas. Grenard, que había sido el amante grumete de un marinero rico con el que le dio tres vueltas al mundo y ya sumaba cinco hijos y dos mujeres, supo que Elena sería el iceberg con el que probablemente naufragaría.</div>
</div>
GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-7343166400911293192018-06-05T09:14:00.001-07:002018-11-13T16:21:07.610-08:00<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: , , , ".sfnstext-regular" , sans-serif; font-size: 14px;">En ese parasiempre que duraba tan solo un segundo, capaz de contener la experiencia entera y el espacio infinito, todos los momentos desde su primera inhalación hasta su último suspiro que en el espacio de una respiración significaban la vida y la muerte y todas las posibilidades intentadas o no. En esa eternidad lo supo, llevaba tanto tiempo imaginándolo que probablemente quedaba muy poco de él mismo en lo que ella estaba viendo. </span><br />
<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: , , , ".sfnstext-regular" , sans-serif; font-size: 14px;">No le importó.</span>GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-18961017908755043822018-06-05T09:13:00.003-07:002018-11-13T16:21:24.707-08:00<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: , , , ".sfnstext-regular" , sans-serif; font-size: 14px;">Ella, cuyo nombre de superhéroe era Colapso, estaba sentada calculando cuál sería su muerte probable para ese día. Ya había tachado en la lista las obvias enfermedades incurables, las perfectas y fatales casualidades, los intentos heroicos, las venganzas kármicas, los asteroides y las invasiones bárbaras. Pero era domingo y por cómo andaban las cosas últimamente, seguramente moriría de aburrimiento.</span>GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-13225389684208707512018-06-05T09:13:00.001-07:002018-11-13T16:21:38.136-08:00<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: , , , ".sfnstext-regular" , sans-serif; font-size: 14px;">Que dios te bendiga, le dijo.</span><br />
<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: , , , ".sfnstext-regular" , sans-serif; font-size: 14px;">Ella, que es del tipo porno para amas de casa, más del estilo cenicienta que de las historias que incluyen personal de servicios varios y técnicos en reparación. Ella, que escogía sus tendencias espirituales entre las cosas que empezaban por P: había sido panteísta, politeísta, pastafari y ahora estaba con el paganismo. Por estos días le iba a Frejya, y no porque había engendrado una prole de hombretones de esos de rubia melena trenzada y pecho enorme y peludo, capaces de preñar una mujer con saludarla desde lejos, sino porque la mona andaba en un carruaje tirado por gatos. Hay que ser muy jodidamente poderoso para lograr que una manada de gatos hagan eso, o que hagan algo, cualquier cosa. </span><br />
<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-family: , , , ".sfnstext-regular" , sans-serif; font-size: 14px;">Ella, no supo qué responderle, pero dijo gracias. Tal vez Frejya le escuchara, así fuera martes.</span>GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-32030962735949975812018-06-05T09:12:00.001-07:002018-11-13T16:21:49.769-08:00<span style="background-color: white; color: #1d2129; font-size: 14px;">Cerró la puerta y tuvo que recostar la espalda en ella, ya no había aire suficiente, las piernas temblaron y las rodilla no funcionaron más. Se dejó caer, o más bien se fue escurriendo porque ya dudaba de que estuviera hecha de alguna materia medianamente sólida. Supo exactamente cuánto pesaba un corazón roto: doscientos cincuenta gramos y no tenía fuerza para sostenerlos. Probablemente tampoco estaba interesada en recoger los pedazos. Respiró. Esto también pasará.</span>GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-32093877715863812992018-05-10T09:24:00.002-07:002018-11-13T16:22:04.591-08:00<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt;">
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt;">
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt;">
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt;">
<span style="background-color: transparent; font-family: "arial"; font-style: normal; font-variant: normal; font-weight: 400; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Lo descubrió sentado en un rincón arrancándose con los dientes los cueros de los dedos. Intentaba meter suspiernastanenormementelargas por entre las patas de una mesa y le valía madres lo que fuera que estuvieran discutiendo en la sala. Él era oficialmente la cosa más bonita que había visto en esta reencarnación. Imaginó lo rápido que podría correr con semejante tamaño, en caso de que un día tuvieran que huír. Le intrigaba porque ella no tenía más opción que esconderse como un ratón, su estrategia nunca había sido la velocidad sino más bien el arte de desaparecer. </span></div>
<span id="docs-internal-guid-8559e514-7fff-f676-a9d4-ae9131c54ca0"></span><br />
<div dir="ltr" style="line-height: 1.38; margin-bottom: 0pt; margin-top: 0pt;">
<span style="background-color: transparent; font-family: "arial"; font-style: normal; font-variant: normal; font-weight: 400; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Se acercó a preguntarle cuál era su función en ese circo, él solo respondió “me alquilo para escuchar”. Ya estaba, no era posible que tanta poesía cupiera en 195 cm de estatura. Decidió llevarle todos los días chocolates y galletas y dulces en paquetes de colores, para que no tuviera que morderse las uñas hasta sangrar. Nunca se aprendió su nombre, no le pagaban para recordar.</span></div>
</div>
</div>
</div>
GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-53756496603147547802018-04-29T09:40:00.001-07:002018-04-29T09:40:56.688-07:00Ese sentimiento que comenzaba en las tripas y subía hasta la boca del estómago para luego resolverse en náuseas. No estaba segura de si era el presagio del fin del mundo o al menos de su propia muerte, o más bien estaba necesitando un Peptobismol. Tanto tiempo con lo mismo que había perdido la capacidad de decidir entre sus manías mentales y una gastroenteritis. Al final daba lo mismo. Pensó en correr, pero era domingo y estaba lloviendo. La gente no debería desaparecer los domingos porque los volvía demasiado redundantes. Decidió hacerse un ovillo en la cama, tal vez así lograra convertirse en un zorro invisible.GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-59273063127325730652018-04-28T19:46:00.001-07:002018-05-05T14:12:44.279-07:00Y entonces ella corrió.GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-71961943842956733092018-04-26T08:33:00.002-07:002018-05-05T14:12:37.720-07:00<span style="font-family: "arial"; font-size: 11pt; white-space: pre;">Se le había olvidado que lo quería, por la pura falta de uso de ese amor viejo que habitaba como fantasma descalzo entre los corredores de su historia.</span><span id="docs-internal-guid-ee27de7b-0295-f21d-3090-4b4369f69441"></span>GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-58450860638166305692018-04-18T13:46:00.005-07:002018-04-18T13:52:14.598-07:00Prometieron encontrarse en otra vida pero iba a estar medio jodido, él se sentía condenado al infierno y ella planeaba reencarnar en gato.GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-4145872430507607609.post-75551443070244890192018-04-17T14:07:00.000-07:002018-04-18T11:43:34.085-07:00Catálogo de ideasApenas le abrió la puerta, se la soltó así, sin dudarlo, porque llevaba tantos días perdidos dándole vueltas a la idea, que había ido y venido por entre todos los escenarios posibles, las historias imaginadas, las vidas soñadas, y ya no le quedaba nada más que inventarse, solo la verdad limpia y afeitada.<br />
—De todas las putas malas ideas que he tenido, y han sido muchas, vos sos la peor.GATONECIOhttp://www.blogger.com/profile/01959594744215162980noreply@blogger.com0